Las tres cuartas partes de la superficie terrestre se encuentra cubierta por el mar.
Su importancia para la supervivencia humana es crucial. Bajo su superficie se encuentran multitud de recursos que con un aprovechamiento racional, podrían ser casi inagotables. Sin embargo parecemos empeñados en destruirlo.
La linea de costa está entre los lugares más apreciados por la sociedad y a la vez es uno de los peor gestionados. Cada vez se hace más necesario controlar los excesos que pueden llevarnos a un auténtico desastre sin retorno.